Page 84 - HOSPES DREAMS Verano

Galicia,
un sitio
distinto El noroeste español
está viviendo una auténtica revolución con sus blancos y tintos de variedades autóctonas recuperadas procedentes de denominaciones históricas como Ribeiro o emergentes como Valdeorras, Ribeira Sacra y Monterrei.
Manuel Formigo
Cholo (Ribeiro)
La uva blanca loureira siempre ha sido una variedad complementaria en Ribeiro o en el Valle del Rosal. Última generación de una larga estirpe de viticultores galaicos, Manuel Formigo quiere reivindicarla aquí elaborándola en solitario, para resaltar su carácter cítrico y su elegante acidez. Este Cholo, del que produce 1.500 botellas, procede de cepas de más de 30 años de la nca Moñotiera, a orillas del río Navia, con suelos graníticos que imprimen al vino un per l mineral que acompañará estupendamente un pescado en ceviche o marinado.
Albamar
Ceibo 2015 (Valdeorras)
Albamar es una bodega familiar que, en apenas cinco lustros, se ha convertido en un nombre de culto en las Rías Baixas por sus blancos precisos y sus tintos oceánicos. El mérito de esta ascensión corresponde a uno de los hijos de la familia, Xurxo Alba Padín, que tomó las riendas en 2006 para llevar un paso más allá la viticultura orgánica y la vini cación sin aderezos. Ceibo es la primera entrega de su nuevo proyecto en Valdeorras: apenas 3.500 botellas de godello procedente de un viñedo en La Ermita, a 550 metros de altitud, cuyos suelos de arcilla, granito y cuarzo otorgan al vino un carácter digno de una raya a la gallega o un rodaballo a la parrilla.